viernes, 24 de agosto de 2018

Las Rendijas de la memoria


José Cruz cabo
El Centro Cultural de las Tierras Bañezanas acogió la presentación del libro ‘Las rendijas de la desmemoria’, el último trabajo de la antropóloga de raíces bañezanas y astorganas Lala Isla Ortiz donde desgrana una serie de historias de lo que ocurrió en la época de la Guerra Civil y la posguerra tanto en Astorga como en La Bañeza. Una recaída en su enfermedad impidió a la autora estar presente en el acto de puesta de largo de su libro en La Bañeza, pero en la mesa estuvieron la concejala de Cultura, Carmen Martínez, el editor José Antonio Martínez Reñones y el escritor e investigador jiminiego, José Cabañas González.
La verdad es que me hubiera gustado estar en la presentación de este libro, ya que a Lala la conocí en el restaurante Madrid, hace unos años cuando vino a la fiesta de los 05 años que cu,plió Josefina Alonso Ruíz porque se conocían de la época de la guerra que ya eran algo más que niñas y además vecinas cercanas. Cuando Lala venia de Astorga o cuando hizo los cursos en las Carmelitas de 
nuestra ciudad ya eran amigas y habían mantenido la amistad a pesar de machar Lala para Inglaterra y Josefina para Oaris. Su amistad aun sigue aunque los achaques de la senetud no les permitan hacer la vida que quisieran. El libro anterior de Lala, que leí y comenté en alguno de la periódicos donde he  escrito me enseñó muchas cosas de nuestra ciudad que yo no conocía a pesar de haber nacido en ella. Por ello espero hacerme con el libro porque será interesante para la historia de La Bañeza.

jueves, 16 de agosto de 2018

Gloria Vegué Cantón


José Cruz Cabo
Tuvo la suerte nuestra ciudad con que naciera aqui Gloria Begué Cantón y la desgracia de que mataran a su padre los odios de la guerra incivil, aunquo se contaba en aquella fecha, que fue por celos, ya que la persona que hizo el encargo dr manadarlo asesinar, fue porque estaba enamorado de la madre de Gloria y circulaba un nombre concreto en la ciudad.
Pero Gloria marchó de su Bañeza para no saber nada de ella y consuguió encontrar el cadáver de su padre y llevarse para Madrid  todos los restos mortales de su familia-
Yo solo la vi una vez, pero nunca la pude saludar de las pocas veces que venía a La Bañeza, pero si hablar por teléfono largo y tendido con ella, para que al final me negara la entrevista que quería hacerle, pero dijo que ella de su ciudad de nacimiento solo tenía recuerdos negros y de mala conciencia, por lo que sintiéndolo mucho no me daba la entrevista.
También fueron a Madrid a casa de ella cuando ya era una persona famosísima a nivel mundial, ya que el entonces alcalde Antonio Fernández y la concejal Nuri Pérez Ogando, querían ofrecerla la medalla de plata de la ciudad y una calle  con su nombre, pero fue imposible convencerla y así, una de las primeras mujeres valiosísimas en su profesión y en los cargos que ocupó, no pudo ser reconocida en su ciudad de nacencia aunque se intentó por todos los medios. Una pena pero su nombre debe estar unido a su ciudad porque lo mereció y porque eso ensalza a La Bañeza en todo el mundo.