sábado, 30 de septiembre de 2017

Una pequeña historia de El Adelanto

José Cruz Cabo
El Adelanto llegó a mi vida en el año 1948, cuando vino para nuestra ciudad el gran sacerdote como párroco de El Salvador, D. Francisco Viloria Morán.
El periódico estaba en la imprenta entonces de D. José Marcos de Segovia. hoy imprenta Rancho. se iba a dejar de publicar porque se debía bastante dinero a la imprenta y esta iba a acabar con su edición. D. Francisco, habló con mi tio Rafael Cabo Valenciano y le dijo que si le entregaba la cabecera el lo imprimiría. La cabecera la Imprenta de Don José no la daba hasta que no le pagaran la deuda. Don Francisco marchó a su pueblo, Fonfría, vendió una finca suya y con ello volvió a nuestra ciudad y pagó la deuda de nuestro semanario, con lo que la cabecera vino a la imprenta de mi tío Rafael, quien se hizo cargo de la Dirección del semanario, con las colaboraciones de Manuel Martín “El Pañero”, Contado Blanco González, el entonces “confitero”, y hoy siempre recordado cronista, Enrique Alonso Sors, Pilar Núñez Alonso, José Luis Baeza, José Santos con el seudónimo de Alday, Don José Marcos, Vicente Cadenas y colaboraciones de Luis Santos de Mata.
Yo comencé a confeccionarlo con mis maestros Luis Cadenas, y José Santos. Pasado un tiempo, sobre el año 1955 comencé a escribir las crónicas de futbol de La Bañeza F.. C. todo siguió normal saliendo todas las semanas y dejando deuda a la parroquia que era la dueña del mismo. sobre el año 1950 se hizo cargo de la administración del mismo , Juan Cabo Diez, quien comenzó por hacer una limpieza de suscriptores que no pagaban, se dieron de alta otros y pasados unos años el periódico estaba a papel ni ganaba dinero ni tenia deudas. En los finales de los cincuenta y primeros de los sesenta, el subdirector fue un joven llmado Emilio Alonso (Churi) hasta que tuvo la desgracia de matarse en un charco en curva de la carretera de Hospital de Orbigo
En 1967, ya fallecidos Don Francisco y al poco mi tío Rafael, llegó a la parroquia Don Santiago Carrizo Villadangos, y en enero del año siguiente, recibió las las primeras tres mil pesetas de superávit que al fin conseguía El Adelanto,.
se celebró una reunión al año siguiente en Acción Católica y se nombró subdirector a Don José Marcos de Segovia, quien estuvo unos meses y luego Don Santiago nombró de subdirector a Florencio Pérez García (Chencho), que pasadas las fiestas del año 1968, se marchó a trabajar para el entonces diario “Proa”, y Don Santiago nombró subdirectores a Polo Martinez y Carlos Alonso. El año 1972 en octubre, me hice cargo de la subdirección del periódico, al marcharse Polo a una oficina de hacienda que hubo en nuestra ciudad y con el tiempo se marchó con su esposa Julina Alonso para León,
Entonces volvió a hacerse cargo de la administración Saturnino Cabo, propietario de la imprenta donde se hacía el periódico y donde yo trabajé hasta mi jubilación. Nino ni yo teníamos sueldo y el periódico iba sacando superavit que se entregaba al principio del siguiente año a la parroquia y así estuve 32 años hasta que el semanario cambió de dueño y la parroquia se lo entregó a un particular y nos dejó a Nino y a mi, sin darnos ni siquiera las gracias por tantos años luchando por El Adelanto.

viernes, 22 de septiembre de 2017

Cuando yo firmaba PACUM


José Cruz Cabo
El primer artículo que escribí en el Adelanto Bañezano, fue en 1951 en mayo, y cuando se cumplieron los cincuenta años de dicha efemérides, la dirección y compañeros de trabajo, me hicieron un número extraordinario y me regalaron la primera crónica que escribí en  en un marco que tengo colgado en casa.
Durante los años que firmé como PACUM, seudónimo que fue obra de José Santos Carrascal, más conocido por Alday, ya que yo le sustituí en el añó 56, como cronista deportivo del semanario local, y trabajábamos en Gráficas Rafael y vivíamos en el San Eusebio ambos, debido a que había tocado en la banda durante seis años el trombón, me sacó lo de Pacum.
Con este seudónimo hacia las crónicas deportivas tanto de los campeonatos de verano en La Llanera, como los partidos del equipo de Acción Católica denominado la OAR y en el que jugué dos temporadas, hasta que el médico de mi familia, muy amigo de mi tío Rafael Cabo, me dijo el día después de un partido que jugué en La Llanera, para ver si valía para La Bañeza F. C. que se iba a formar en aquel año. Don Julio Tagarro me dijo después de auscultarme: “Mira Pepe, si cuando se acaba el partido pudieras comer un buen bocadillo de jamón, cosa que entonces solo podían comer los ricos. te diría que siguieras jugando, pero como se que al final del partido no tienes forma de comer algo nutriente, deja el fútbol porque la tuberculosis te puede mandar para el otro mundo”. Así dejé el fútbol y fue como me dio por escribir. Con el seudónimo este pude salvarme de dos palizas. Un día estaba viendo el partido entre la OAR y otro equipo de la ciudad, y pusieron a Paco Fidalgo por mí, y se dió la circunstancia de que Paco Fidalgo estuvo sentado en la valla de madera hablando conmigo, mas de la mitad del partido. A la semana siguiente yo lo puse en la crónica de ese día y que por su culpa había perdido la OAR el partido, y anduvo indagando quien podía ser ese Pacum, para darle una paliza. En otro partido de dos equipos bañezanos, ya que en aquella época había unos cuantos onces juveniles, de Falange, del Polvorín, de la Laguna, de estudiantes, del Racing, del Marina, etc. un jugador de uno de ellos, no le gustó como lo puse y también andaba buscándome para darme una paliza, pero el nombre auténtico no se llegó a saber hasta años después cuando yo escribía con mi verdadero nombre, con el que también tuve algún problema pero estos quedaban  en pequeñas discusiones o enfados.
Fueron bastantes años haciendo la crónica deportiva de El Adelanto, hasta que me sustituyó primero Pepe Blanco y después de unos años Mariano Casado, aunque yo hasta el año 95 la seguí enviando a Diario de León, y seguí haciéndolo hasta el 2007 para la Agencia Mencheta y una Agencia de Barcelona, hasta el año dos mil siete.
En fin son pequeños detalles de recuerdos, que salen ahora, y quieren compartirse con los actuales, porque no dejan de ser historia para que la gente conozca la diferencia de entonces ahora de costumbres, aspecto y mejora de la ciudad, para sacar la diferencia de ayer a hoy.

El día que vino Manuel Fraga a La Bañeza


José Cruz Cabo
Manuel Fraga Iribarne, estuvo en La Bañeza para celebrar un mitin electoral en la Sala Ramsés segundo, hoy cerrada y entonces en pleno rendimiento, ya que los fines de semana se abarrotaba de gente que yo tuve que aguantar varios años desde el año 67, que aun iban a comenzar las obras de la misma, hasta el año 87 que cambié de casa y calle donde desde entonces vivo.
La venida de Fraga, en aquellos años que era Ministro de la censura de todo lo que se publicaba, dado que había que mandar obligatoriamente tanto los periódicos, revistas, carteles, libros y todo lo que tuviera letras para poderlos sacar a la calle, si te daban el visto bueno, ya que por dos veces El Adelanto fue multado por dos artículos de José Luis Baeza y don Santiago tuvo que sudar para que le quitaran las dos multas, eran de 50.000 pesetas cada una.
Había muerto ya Franco, comenzaban a organizarse los partidos para las primeras elecciones que se iban a celebrar después de cuarenta años, y Fraga acababa de crear Alianza Popular, para competir con los demás partidos,
Llegó por la tarde para dar el mitin en la Ramsés, fuertemente escoltado. Cuando comenzó el mismo un joven paisano de familia conocida, se le ocurrió preguntar algo que hizo enfadar a Fraga y la escolta lo sacó de la sala a correazos.
Pero lo que mejor denotó el carácter de mando de Manuel Fraga y que lo que no le gustaba que le preguntaran servia para finalizar las ruedas de prensa, fue lo que pasó después,  Aquel día se nos dijo a los que cubríamos información, que al final del mitin, Fraga haría una rueda de prensa para que le preguntaran lo que los periodistas quisieran. Yo entonces, además de El Adelanto, llevaba Radio Astorga, Diario de León y Agencia Efe y todos  deseaban lo que Fraga dijera. Nos hicieron subir al salón de bodas de la sala Ramsés, arribó Manuel Fraga entre aplausos de sus incondicionales y de algunos de la prensa. Nos sentamos todos y a Isidro Martínez, que entonces escribía en el Faro Astorgano, y se había desplazado a nuestra ciudad para el mitin de Fraga, se le ocurrió hacerle una pregunta que al dominante ministro no le gustó y acto seguido dijo “se acabó la rueda de prensa, esas preguntas a mi no me gusta que me las hagan y no quiero contestarla”, así que adiós. Se levantó y se marchó dejándonos con las preguntas en el cuerpo.
Primero mandó sacar a un joven bañezano a palos de la sala por preguntarle algo que no le gustó y luego nos dejó a todos los escribidores sin contarnos nada porque no le gustó la pregunta de Isidro Martínez. Así era Manuel Fraga Iribarne.

miércoles, 20 de septiembre de 2017

Mi pasión por la lectura

José Cruz Cabo
Aunque ya sabia leer cuando a los seis años entré en la Escuela Villa, hasta los 14 años no comencé a sacarle gusto a la lectura, y como todos los de mi época los primeros libros eran aventuras del Oeste americano. Pero como por entonces se creo la escuela Nocturna de Acción Católica, el profesor de lengua y literatura era Enrique Alonso Sors, quien definitivamente me inculcó la pasión por la lectura de provecho. Me dejó de su biblioteca ocho tomos, de unas seiscientas páginas cada uno, de la Historia de España. Luego me aficioné a la poesía con el libro de la biblioteca de mi tío Rafael. “Las mil mejores poesías españolas”.
Después ya cualquier libro me valía y comencé a leer de todo, aprovechando que se había inaugurado en el primer piso del ayuntamiento la Biblioteca Pública, donde el señor Acebes primero, Vicente Cadenas después y José Luis Llanos con el que pasó esta instalación del ayuntamiento al edificio que hoy tiene el museo de las Alhajas y que pasados unos años se hizo la biblioteca pública actual y en lo que fue biblioteca se puso la academia de música porque la Escuela Villa donde  hice los estudios de música y ensayaba la banda, se estaba cayendo y se convirtió luego en el Hogar del Jubilado.
Entre la biblioteca de mi tio y la oficial del ayuntamiento, comencé a leer con pasión y ganas y a pesar del frío de las malas casas de entonces, me acostaba y cambiando de mano cada poco, iba leyendo en la cama tapadín, hsta que el sueño me rendía. En el año 55 cuando me casé con la esposa que se me murió, pase a vivir a Casa de Doña María Ruiz y sus hijas Victoria y Josefina me dejaban libros de su gran librería, a pesar de quemársele bastantes libros por un fuego que tuvieron en los años cuarenta. Ya casado comencé a comprar libros y entre los que yo tenía y otros que me dejaban algunas amistades fue como sin estudiar periodismo, me dio por escribir, siempre cosas de La Bañeza, primero de fútbol, a partir del año 51 que publicaba, primero en el Adelanto, después en Radio Popular de Astorga, hoy Cope Astorga, donde sigo de corresponsal diario y llevo 52 largos años, al Diario de León, donde estuve 30 años escribiendo de todo de nuestra ciudad, en Radio León de la cadena Ser, durante unos pocos años, donde además tenia quue dar para Radio Bilbao la crónica de futbol de La Bañeza todos los domingos que jugaba en casa,. También estuve unos años en la agencia EFE mientras estuvo la central en Valladolid, cuando pasó a Madrid lo dejé, porque era complicado las llamadas por teléfono. Luego cuando sin venir a cuento pasó el periódico de ser de la Parroquia de Santa María a persona particular y no decirme nada hasta que estaba hecho el trato, tuve que dejar el Adelanto después de 52 años escribiendo y ls 33 últimos de subdirector. Solo me dijeron puedes seguir escribiendo, pero eso era decirme pasamos bien sin ti, como se ha demostrado, porque no me dieron algún homenaje y cuando hace dos años se pidió la alubia de oro para mí, no quisieron dármela.
Por eso comencé a colaborar con Ibañeza, que hacia poco que había iniciado su andadura como periódico digital, y con “La Bañeza Hoy”, donde quieren hacerme un homenaje por llevar 10 años colaborando gratis en dicho semanario, En fin que sin ser periodista he escrito de La Bañeza más que nadie en medios locales, provinciales y hasta fuera de nuestra provincia

sábado, 9 de septiembre de 2017

Cataluña no puede separarse


José Cruz Cabo
Cuando unos pocos catalanes comenzaron a hablar de independencia, lo primero que tenía que haber hecho el gobierno correspondiente de entonces, era haberle pasado la factura de lo mucho que el resto de españoles pusimos para sus juegos olímpicos.
Pero antes de eso cuando las industrias se ponían en Barcelona y se llevaban a todos los andaluces y extremeños para que les trabajaran para ellos, estaban muy contentos. Cuando se hicieron las autonomías, ellos quedaron felices porque fueron mejorados en  contra de otras como Castilla y León. Todo marchaba como la seda y encima los políticos catalanes se llenaban los bolsillos a costa de las empresas y de que el gobierno no entraba en detalles económicos ilegales. Se les permitió crear embajadas en el extranjero a costa del dinero de los españoles, cuando ellos no eran más que una provincia y no la mejor de España.
Ahora quieren separarse porque llegaron las vacas flacas y tienen deudas hasta en los cajones de los ratones de la Generalidad. Porque si se separan habrá una frontera y tendrán que marcharse de la Unión Europea, el euro no les valdrá ni para fumar un cigarro, porque con la deuda que tienen y sin euro tendrán que salir a pedir. El F.C.Barcelona ya no podrá jugar en la Liga española de futbol. En las fronteras tendrán que pagar los que entren y los que salgan y eso encarecerá los productos y el resto de los españoles preferirán comprar en una nación de la Unión Europea y no a ellos. Los miles de camiones y furgonetas que tienen que pasar la frontera para Francia tendrán que dejar de pasar por allí y hacerlo por Irún que no tiene costes a mayores; muchos barcos dejarán las radas catalanas y desembarcarán o recogerán mercancía en otros puertos de mar.
Y finalmente la deuda que tienen con el Estado Español, que les ha permitido gastar de mas tendrán que pagarla en incomodos plazos.
En fin, si Cataluña es algo en el mundo y la gente extranjera lo sabe, es porque pertenece a la Nación Española
Todos los beneficios que Cataluña tiene se debe a que es una de las provincias de España y nunca ha sido otra cosa. Una autonomía que se ha llevado las mejores tajadas económicas de todos los españoles.
Que al Gobierno no le tiemble el pulso  y deshaga este monumental entuerto que muchos de los que quieren separarse han nacido fuera de Cataluña. y encima no son catalanes. En la cárcel estarán mejor que gobernando Cataluña y los catalanes tendrán una vida mejor estando donde están en España.

Aquellos tiempos que ya se fueron


José Cruz Cabo
Cuando me pongo a repasar los recuerdos de la niñez, me encuentro que siendo niño en donde hoy está Gráficas Nino, estuvo la oficina de telégrafos y cada vez que paso por esa calle me viene a la memoria un muñeco colgado de uno de los balcones de la casa con una soga al cuello que queria ser el entonces presidente de la republica española ya en el exilio, Azaña, colgado por la garganta el muñeco que me ha impactado toda la vida dicha figura colgada, pasada la guerra civil, telegrafos pasó a correos y cambió de ubicación y al poco yiempo este edificio pasó a ser una peluquería y barberia de caballeros, que estuvo varios años funcionando y hoy es la imprenta y librería desdde el año 67 estos días hace los cincuenta años de su fundación: Gráficas NINO
Lo curioso de este edificio es que aquí estuvo telégrafos que nos consiguió el entonces ministro de Alfonso XIII, Romero Robledo que por eso esta calle se llamaba a´si hasta que estalló la guerra civil y con posterioridad se le dió el nombre a la calle que lo tiene ahora. En aquella oficina de telégrafos, trabajaba en los principios de los años 30, el bañezano Lorenzo Cabo Valenciano, padre de Saturnino Cabo, que despues fue ascendido a jefe de telégrafos y lo destinaron a La Magdalena y hoy su hijo es el que tiene el negocio en este mismo local.
Con el inicio de la guerra civil, se cambió el nombre a muchas de las calles bañezanas,, especialmente con la victoria de los sublevados se les dieron muchas de las calles de nuestra ciudad, que ahora se han cambiado por otros nombres más acordes con nuestra historia.
La calle del General Franco es ahora la calle del reloj, que era el nombre desde hacia muchos años, hasta que hubo que tirar el arco para que pasaran los grandes carros del principio delsiglo 20. Como ahora la calle de Primo de Rivera es ahora la Vía de la Plata. O la calle General Aranda es ahora la de Conradoi Blanco.
La Avenida del General Benavides es el nombre de un bañezano que llegó a General y que se le dio la calle por los servicios que le hizo a nuestra ciudad mientras vivió y salvó a muvchos de los quintos y soldados que tuvieron que ir a la guerra y que el pudo cambiarles el destino para que no fueran al frente. Son recuerdos de un octogenario que no quiere que se pierdan sin ser contados y queden para la historia de la ciudad.